“Las palabras de la Torá son pobres en un lugar, pero ricas en otro.” — Talmud Yerushalmi, Rosh Hashaná 3:5
Estudio completo del Midrash Yalqut Shimoni (Yalkut Shimoni)
1) Qué es y por qué importa
Yalkut Shimoni (también “Yalqut” a secas) es la antología midráshica más amplia y conocida que abarca toda la Biblia hebrea (Torá, Profetas y Escritos). Reúne—y ordena según los versículos—material aggádico (no legal) procedente de midrashim anteriores, Talmud (Babilonio y de Jerusalén) y otras colecciones, preservando incluso pasajes que se conocen hoy sólo porque fueron copiados ahí.
2) Autoría, lugar y fecha
- Tradicionalmente se atribuye a Shimón ha-Darshán (“jefe de predicadores”) de Fráncfort, un erudito ashkenazí. La atribución alternativa a Shimón Kara (padre de R. Yosef Kara, contemporáneo de Rashí) fue refutada críticamente (A. Epstein). El consenso académico sitúa la compilación en el siglo XIII (Ashkenaz, sur de Alemania).
- Evidencia temprana: se menciona un manuscrito en 1310 (Azariah dei Rossi).
Conclusión editorial: hablamos de una compilación medieval (s. XIII) realizada en medios ashkenazíes, que sistematiza tradiciones anteriores y contemporáneas.
3) Alcance y estructura de la obra
El Yalkut está dividido en dos grandes partes, cada una numerada por secciones (simaním):
- Parte I: Torá (Pentateuco) – 963 secciones:
Gn 1–162; Ex 163–427; Lv 428–682; Nm 683–788; Dt 789–963. - Parte II: Nevi’im y Ketuvim (Profetas y Escritos) – 1.085 secciones (ejemplos):
Jos-Jue-Sam-Rey 1–252; Jr 253–335; Ez 336–384; Is 385–514; Doce profetas 515–595; Rut 596–609; Salmos 610–890; Job 891–928; Proverbios 929–965; Qohelet 966–979, etc.
Cómo se cita: suele usarse “Yalkut Shimoni, siman X sobre [libro/versículo]”. La numeración de Torá y de NaJ corre por separado.
“De cada versículo emanan setenta rostros.” — Bamidbar Rabbá 13:15
4) Fuentes y método de compilación
El redactor extracta y reubica materiales de una amplísima red de fuentes:
- Midrashim “halájicos” y exegéticos tempranos: Sifra, Sifré, Sifré Zuta, Mekhilta, Seder Olam, baraitot de las 32 y 49 reglas, Melejet ha-Mishkán, etc.
- Talmud y literatura para-talmúdica: Mishná, ambos Talmudim, Semajot, Kallah, Soferim.
- Midrashim aggádicos “clásicos” y homiléticos: Midrash Rabbá (salvo Ex Rabbá), Pesikta y Pesikta Rabbatí, Tanḥuma, Devarim Zuta, Pirqué de R. Eliezer, midrashim a Samuel, Salmos, Proverbios, Job, entre otros.
- Ética/leyendas: Avot de R. Natán, Tanna debe Eliyahu, Derej Éréts, relatos sobre Moisés, etc.
Técnica editorial:
- Resume, abrevia o traslada pasajes, con cruces y repeticiones cuando una misma aggadá aplica a varios textos.
- A veces cita sólo “Midrash” sin precisar cuál, o remite al lugar donde aparece completo.
5) Transmisión textual y primeras ediciones impresas
- Editio princeps: Salónica, 1521 (parte de Profetas y Escritos); Pentateuco en 1526–1527 (Salónica).
- Venecia, 1566: edición completa influyente, base de la mayoría de reimpresiones posteriores.
- Livorno, 1650–1659: añade correcciones y comentario de R. Avraham Gedalyah; la edición Vilna, 1898 incorpora fuentes, glosario e índice y anexa el comentario Zayit Ra‘anán de R. Avraham Abele Gombiner.
(Nota: se conserva también una tradición de manuscritos; hay descripciones de piezas parciales en catálogos como el de la Biblioteca Vaticana, pero la transmisión impresa del s. XVI fijó en gran medida el texto que circula hoy.)
“El estudio sin reflexión es como sembrar sin cosechar.” — Pirkei Avot 3:10
6) Perfil literario y teológico
- Género: aggadá (narración, teología, ética, simbolismo). El material legal (halajá) es marginal.
- Función: herramienta homilética y exegética para predicación y estudio; organiza por versículo lo disperso en muchas colecciones.
- Aporte decisivo: preserva midrashim hoy perdidos o fragmentarios fuera del Yalkut.
7) Relación con otras “Yalqut” y aclaraciones
- Yalkut ha-Makhirí (Machir ben Abba Mari, s. XIV): antología paralela pero parcial, que cubre Isaías, Jeremías, Ezequiel, Doce Profetas, Salmos, Proverbios y Job; no debe confundirse con el Yalkut Shimoni, que cubre toda la Biblia. Algunos han propuesto relaciones editoriales, pero son hipótesis.
- Yalkut Reuveni (siglo XVII, místico/cabalístico): obra totalmente distinta, posterior. (Se menciona aquí sólo para evitar confusiones; no forma parte del corpus del Shimoni).
“El Yalkut Shimoni no inventa nada: salva lo que estaba a punto de desaparecer.” — Heinrich Graetz, historiador judío del siglo XIX.
8) Cómo se usa el Yalkut hoy
- Ediciones modernas: Jerusalén (Machón HaMeor, 2001; Yarid ha-Sefarim, 2006); reimpresiones en varios formatos.
- Acceso digital (texto hebreo): Sefaria (Torá y NaJ), con segmentación por siman y enlaces a fuentes.
- Traducciones: proyecto de traducción alemana en 17 volúmenes (Börner-Klein).
Buenas prácticas de cita: indicar libro/versículo, siman y, si procede, edición (p. ej., Salónica vs. Venecia) dado que hay variantes y añadidos (p. ej., kunteres ajaron de Salónica en Pentateuco).
9) Fortalezas y límites para el investigador
Fortalezas
- Panorama sincrónico de tradiciones aggádicas dispersas.
- Ventana a midrashim perdidos o inhallables.
- Organización por versículos facilita uso exegético.
Límites
- El redactor abrevia y reubica; puede duplicar materiales o citar de forma genérica (“Midrash”) sin fuente precisa.
- No es una obra original de un solo autor ni una edición crítica de sus fuentes; exige verificar en los midrashim base cuando la precisión sea esencial.
“Quien lee el Yalkut Shimoni, no estudia un libro: recorre los siglos de la exégesis judía.” — Rabí Avraham Abele Gombiner, comentario Zayit Ra‘anán.
10) Esquema práctico para estudiar el Yalkut
- Identifique el pasaje bíblico y su siman correspondiente.
- Lea el fragmento en Sefaria y revise los enlaces a fuentes.
- Cuando el Yalkut diga sólo “Midrash”, rastree en Midrash Rabbá, Tanḥuma, Pesikta, etc., para recuperar el contexto completo.
- Para historia del texto, contraste Salónica 1521/1526, Venecia 1566 y Livorno 1650–59; observe añadidos y correcciones.
11) Conclusión
Yalkut Shimoni es la piedra angular para la aggadá bíblica: no crea una teología nueva, pero ordena magistralmente siglos de interpretación rabínica y salva materiales que, sin él, se habrían perdido. Su uso serio exige: ubicar el siman, leer el pasaje completo en su fuente original cuando sea posible y tener presentes las variantes de las primeras ediciones.
“Yalkut Shimoni es la sinfonía coral del judaísmo: cada sabio toca una nota, pero todos cantan la misma melodía.” — Rabí David Weiss Halivni, filólogo talmúdico.
