“No desprecies a ningún hombre.”
(Pirqé Avot 4:3)
1. Contexto histórico general
- Época: primera tercera parte del siglo II e.c., es decir, la generación inmediatamente posterior a la destrucción del Segundo Templo (70 e.c.) y en los años de la represión romana previa y posterior a la revuelta de Bar Kojbá (132–135 e.c.).
- Medio: el círculo de los Tanaím (sabios de época de la Mishná). Es casi contemporáneo de rabí Akiva, rabí Tarfon, rabí Yehoshua ben Jananiá, rabí Eliezer y rabí Elazar ben Azaria.
Es un momento de:
- Reorganizar el judaísmo sin Templo.
- Fijar halajá y canon textual.
- Crecer en especulación mística (merkavá, Pardés).
Ahí se sitúa Ben Azzai.
2. Fuentes sobre Ben Azzai
Ben Azzai aparece disperso en:
- Mishná: citado varias veces, en algunos casos como “Rabí Shimón ben Azzai” (por ejemplo, Zevajim 1:3; Yadáim 3:5; 4:2, según ciertos manuscritos).
- Tosefta, Talmud Bavlí y Yerushalmí: relatos, halajot, anécdotas de su piedad y su muerte.
- Midrashim: Bereshit Rabá, Avot de Rabí Natán, Shir HaShirim Rabá, entre otros.
- Pirqé Avot (Ética de los Padres): dos máximas muy conocidas (4:2–3).
No existen escritos “propios” de Ben Azzai: su voz llega a través de estas colecciones.
3. Biografía y perfil personal
3.1. Nombre y status
- Nombre: Shimón ben Azzai, más conocido simplemente como Ben Azzai.
- Tanna de alto nivel, pero algunas tradiciones subrayan que, a diferencia de otros, no se lo llama siempre “rabí”, sino que aparece como uno de los grandes talmidei jajamim (estudiantes de los sabios) que, aun sin ocupar un cargo formal, alcanzó enorme autoridad en Torá.
3.2. Maestros y círculo de estudio
Las fuentes lo vinculan estrechamente con:
- Rabí Yehoshua ben Jananiá: transmite halajá en su nombre e incluso lo defiende frente a otros sabios.
- Rabí Tarfon: aparece como uno de sus maestros.
- Rabí Akiva: figura clave. Ben Azzai estudia con él, comparte métodos de lectura bíblica y, como veremos, entra con él al famoso “Pardés” místico.
Es decir, está en el epicentro del círculo que definirá la halajá post-templo y la hermenéutica rabínica.
3.3. Celibato, compromiso y culto al estudio
Un rasgo llamativo de Ben Azzai es su decisión de permanecer soltero, a pesar de que él mismo predicaba en contra del celibato.
Las fuentes relatan que estuvo desposado con la hija de rabí Akiva, pero nunca consumó el matrimonio porque vivía totalmente absorbido por el estudio de la Torá. Cuando rabí Elazar ben Azaria lo cuestiona por contradecir con su vida su propia enseñanza sobre la obligación de procrear, responde:
“¿Qué puedo hacer? Mi alma está aferrada a la Torá; que otros se ocupen de perpetuar la especie”.
Este punto ilustra:
- Un modelo extremo de devoción intelectual: la Torá como pasión totalizadora.
- Una tensión permanente en la tradición: ¿hasta dónde el estudio desplaza otras mitzvot como matrimonio y procreación?
3.4. Piedad y carácter
El Talmud afirma que “quien ve a Ben Azzai en sueños está en camino a la piedad”, señal de que su figura se convirtió en símbolo de santidad personal.
También se dice que cuando enseñaba, “fuego lo rodeaba” mientras hilaba versículos de Torá, Profetas y Escritos “como cuentas de un collar”, imagen midráshica de una mente que conecta todos los textos en un sistema vivo.
4. La muerte y el misterio del “Pardés”
4.1. El relato clásico: cuatro que entraron al Pardés
La tradición más famosa sobre Ben Azzai es la de los “cuatro que entraron al Pardés”:
- Los cuatro son Ben Azzai, Ben Zoma, Elishá ben Avuyá (Ajer) y rabí Akiva.
- “Pardés” (פרדס, “jardín/orchard”, de donde viene “paraíso”) designa el dominio de la doctrina esotérica, la especulación mística extrema.
- Resultado:
- Ben Azzai: “miró y murió”.
- Ben Zoma: “miró y enloqueció” (quedó dañado).
- Ajer: “cortó los brotes” (se convirtió en hereje).
- Rabí Akiva: “subió en paz y bajó en paz”.
Sobre Ben Azzai se aplica el versículo: “Preciosa es a los ojos de Dios la muerte de Sus piadosos” (Salmos 116:15).
4.2. Interpretaciones
Este relato ha sido entendido de varias formas:
- Lectura místico-literal
- Los cuatro habrían alcanzado una experiencia extática de los “palacios celestiales”, quizás mediante prácticas de merkavá (meditación en el Nombre Divino).
- Ben Azzai, al “mirar” más allá de lo tolerable por un ser humano, muere de puro éxtasis o choque espiritual.
- Lectura simbólica-pedagógica
- Cada desenlace representa un riesgo de la búsqueda intelectual extrema:
- Muerte (ruptura del vínculo con el mundo).
- Locura (desequilibrio psíquico).
- Herejía (ruptura con la comunidad y la tradición).
- Sólo Akiva mantiene equilibrio entre mística, halajá y realidad.
- Cada desenlace representa un riesgo de la búsqueda intelectual extrema:
- Mensaje para el estudio de kabbalá y filosofía
- El relato es usado como advertencia: no todo el mundo puede ni debe entrar en ciertos niveles de especulación; hace falta una base ética y halájica sólida, y una guía adecuada.
4.3. ¿Murió como uno de los “Diez Mártires”?
Algunas tradiciones, no del todo seguras, lo incluyen entre los Diez Mártires de las persecuciones de Adriano, lo que lo colocaría entre los primeros ejecutados por los romanos.
En cualquier caso, su muerte queda teñida de una doble aureola:
- Mártir de la represión romana.
- Mártir de la búsqueda mística (“murió por ver demasiado”).
5. Autoridad halájica y estilo intelectual
5.1. Posición entre los Tanaím
A pesar de su fama por el Pardés, la mayoría de las citas de Ben Azzai son halájicas, no místicas:
- Aparece en Mishná y Tosefta emitiendo dictámenes sobre pureza ritual, sacrificios, relaciones familiares, etc.
- En algunos pasajes, discute con figuras como rabí Meir y rabí Akiva.
Los grandes amoraím (sabios talmúdicos posteriores) usaban su nombre como sinónimo de máxima autoridad halájica:
- Rav y rabí Yojanán dicen de sí mismos, para marcar su peso como maestros: “Aquí soy como un Ben Azzai”.
Es decir, “Ben Azzai” se convierte en título honorífico del erudito ideal.
5.2. Método de estudio: “ensartar las palabras como cuentas”
El midrash Shir HaShirim Rabá describe así su forma de enseñar:
- Une versículos de Torá, Profetas y Escritos como si armara un collar.
- Cada cita arrastra otra, generando tramas intertextuales.
- Mientras enseña, se dice que “fuego arde a su alrededor”, metáfora de intensidad espiritual.
En términos modernos, podríamos decir que es un maestro de:
- Lectura sincrónica de la Biblia (toda la Escritura como un solo tejido).
- Hermenéutica creativa, pero siempre apoyada en textos, no en especulación libre.
6. Enseñanzas éticas centrales
6.1. “Mitzvá goreret mitzvá”
En Pirqé Avot 4:2, se le atribuye esta enseñanza:
“Una mitzvá trae consigo otra mitzvá, y una transgresión trae consigo otra transgresión.
La recompensa de una mitzvá es una mitzvá y el pago de una transgresión es una transgresión.”
Ideas principales:
- La conducta humana tiene inercia moral: cada acto crea tendencia.
- La verdadera “recompensa” de la mitzvá es que te convierte en alguien que hace más mitzvot; la verdadera “sanción” del pecado es volverte alguien que peca más.
- Es una ética muy psicológica: el foco no está en premio-castigo externo, sino en el moldeado del carácter.
6.2. “No desprecies a ningún hombre”
En Pirqé Avot 4:3 se le atribuye otra máxima célebre:
“No desprecies a ningún hombre ni desestimes ninguna cosa,
porque no hay hombre que no tenga su hora,
ni cosa que no tenga su lugar.”
Esto sintetiza:
- Respeto radical por la dignidad de toda persona.
- Consciencia de que el valor y el rol de cada uno puede revelarse en un momento específico.
- Advertencia contra la soberbia intelectual: el sabio no tiene derecho a minimizar a nadie.
6.3. El “principio más grande” de la Torá
Rabí Akiva había dicho que el gran principio de la Torá era “Amarás a tu prójimo como a ti mismo” (Lev 19:18). Ben Azzai contesta que hay un principio aún mayor:
“Este es el libro de las generaciones de Adam:
el día en que Dios creó al hombre, a semejanza de Dios lo hizo” (Génesis 5:1).
Interpretación:
- Mientras Akiva enfatiza el amor al prójimo (dimensión interpersonal),
Ben Azzai enfatiza la imagen de Dios en todo ser humano (dimensión ontológica). - Es un giro claramente universalista: no habla sólo del “prójimo judío”, sino de “Adam”, la humanidad entera.
- Comentadores como el Malbim han señalado que esto se parece a una ética “kantiana”: cada ser humano tiene dignidad intrínseca por ser portador de la imagen de Dios, y debe ser tratado como fin en sí mismo.
Esta afirmación es crucial en teología judía contemporánea sobre:
- Derechos humanos.
- Valor de cada vida más allá de pertenencia comunitaria.
- Diálogo entre judaísmo y ética global.
6.4. Providencia y determinismo
Otras fuentes le atribuyen una enseñanza de tono casi determinista:
“Por tu nombre te llamarán, en el lugar que te corresponde te verán, lo que es tuyo te darán.
Ningún hombre toca lo que está destinado a su prójimo;
y ningún gobierno reduce en un cabello el tiempo que fue marcado para otro gobierno.”
Ejes de esta idea:
- Confianza en la providencia: no sirve la envidia ni la usurpación, cada uno recibirá lo que le corresponde.
- Relativización del poder político: incluso los imperios tienen su “tiempo fijado” por Dios.
- Invitación a centrarse en la propia misión, sin obsesionarse con lo ajeno.
7. Enseñanzas sobre muerte, recompensa y piedad
A Ben Azzai se le atribuyen varias reflexiones sobre la hora de la muerte y el destino de los justos:
- Enseñaba que Dios muestra a los piadosos, cerca de su muerte, la recompensa que les espera, para fortalecerlos en el momento final.
- Su propia muerte es interpretada como paradigmática: “preciosa en los ojos de Dios” precisamente por la pureza de su búsqueda.
Aquí se ve una teología donde:
- La muerte del justo no es fracaso, sino consumación de su vínculo con Dios.
- El sufrimiento del piadoso (incluida posible persecución o martirio) se lee en clave de fidelidad extrema, no de abandono divino.
8. Recepción posterior y huella cultural
8.1. En la tradición rabínica
Como ya se señaló:
- Para Rav y rabí Yojanán decir “soy aquí como Ben Azzai” es declararse en la cima de la autoridad en ese tema.
- Su nombre da título a una sección de Derej Eretz Rabá (“Perek Ben Azzai”), colección ética sobre normas de conducta.
- Es citado en midrashim como ejemplo de:
- Piedad extrema.
- Dedicación total al estudio.
- Capacidad hermenéutica extraordinaria.
8.2. En la cultura moderna
Sin ser masivo, aparece en algunas obras:
- Jorge Luis Borges, en “Tres versiones de Judas”, menciona a Ben Azzai como aquel que “vio el Paraíso y murió”, retomando el motivo del Pardés.
- En la novela “As a Driven Leaf” de Milton Steinberg, participa en los debates filosóficos de Elishá ben Avuyá y muere en un estado de éxtasis espiritual.
Estas recreaciones literarias subrayan el costado intelectual-místico llevado al límite.
9. Síntesis conceptual: ¿qué representa Ben Azzai?
Si tuvieras que retener “lo esencial” de rabí Shimón ben Azzai para tu trabajo analítico, se puede condensar en varios ejes:
- El intelectual absoluto de la Torá
- Persona para la cual el estudio es vocación total; al punto de renunciar (discutiblemente) a matrimonio e hijos.
- Modelo de erudición y piedad al mismo tiempo: no un académico frío, sino alguien cuya enseñanza “arde” (literalmente, fuego en torno suyo en el midrash).
- Universalismo ético dentro de la halajá
- Su “principio mayor” (Génesis 5:1) pone la imagen de Dios en cada ser humano en el centro de la teología.
- Esto corrige posibles lecturas demasiado particularistas de la frase de Akiva sobre “tu prójimo”.
- Psicología moral fina
- La idea de que “mitzvá goreret mitzvá” y “averá goreret averá” describe con precisión cómo los hábitos moldean al sujeto.
- La “recompensa” está ya en el devenir moral de la persona, no sólo en un más allá.
- Advertencia sobre los límites de la especulación mística
- Su muerte en el Pardés es símbolo del riesgo de cruzar ciertos umbrales espirituales sin la preparación adecuada.
- Representa al sabio que muere por ir demasiado lejos en la búsqueda de Dios.
- Confianza radical en la providencia
- Nadie puede apropiarse de lo destinado al otro; ni siquiera los gobiernos pueden prolongarse más allá de lo decretado.
- Visión que combina consuelo para el individuo y crítica implícita a la soberbia de los imperios.
10. Para seguir profundizando
Si quisieras ir al texto talmúdico y midráshico de base, los puntos de entrada más útiles son:
- Pirqé Avot 4:2–3 – máximas éticas clásicas de Ben Azzai.
- Avot de Rabí Natán, cap. 25 aprox. – desarrollo sobre su “principio mayor” y otros dichos.
- Haguigá 14b y paralelos – relato de los cuatro que entraron al Pardés.
- Selecciones de Bereshit Rabá, Derej Eretz Rabá y Shir HaShirim Rabá donde se comenta su método y su figura.
