“La perfección no se alcanza con los ojos del cuerpo, sino con la luz que despierta en el interior.”
1. Qué es el “Evangelio de la Perfección”
- Nombre original probable en griego: εὐαγγέλιον τελειώσεως (euangélion teleíōseōs), que en latín se cita como Evangelium perfectionis, es decir, “Evangelio de la Perfección” o “Evangelio de la Consumación”.
- Forma parte de la literatura apócrifa del Nuevo Testamento, en el grupo de “evangelios bajo títulos generales” (no atribuídos a un apóstol concreto: evangelio de la verdad, de las cuatro regiones celestes, etc.).
- La opinión unánime de los estudiosos (Otero, Hennecke-Schneemelcher, diccionarios bíblicos) es que se trata de un texto de origen gnóstico, probablemente usado por sectas gnósticas como los borboritas u ofitas.
Conclusión de partida:
Sabemos que existió, que fue gnóstico y condenado como herético, pero no sabemos qué decía.
2. Fuentes antiguas que lo mencionan
2.1. Epifanio de Salamina (s. IV)
La fuente principal es Epifanio, obispo de Salamina (c. 315–403), en su gran obra antiherética Panarion (“botiquín de remedios contra las herejías”).
En el Panarion 26, contra los llamados Gnósticos/Borboritas, Epifanio enumera una serie de libros que, según él, usaba esa secta:
- Libro de Noria (mujer de Noé),
- Evangelio de la Perfección,
- Evangelio de Eva,
- Preguntas (o Cuestiones) de María (versiones mayor y menor),
- Libros de Seth,
- Apocalipsis de Adán,
- Nacimiento de María, etc.
En una de las traducciones del Panarion 26,2,5, Epifanio dice acerca de este libro:
Puntos clave:
- Lo considera un escrito ficticio y obsceno, asociado a ritos sexuales heréticos.
- No cita ningún fragmento del Evangelio de la Perfección; solo lo nombra y lo ridiculiza.
“Solo quien conoce su origen reconoce su destino.”
2.2. Filastrio de Brescia (s. IV)
Otro heresiólogo, Filastrio de Brescia († c. 397), en su obra Liber de haeresibus, también menciona el Evangelio de la Perfección, pero su testimonio depende de Epifanio: básicamente repite que se trata de un libro herético y fantasioso.
2.3. Listas antiguas de libros apócrifos
En listas posteriores de “evangelios apócrifos perdidos” (por ejemplo, compilaciones medievales o catálogos modernos que recogen testimonios antiguos) el Evangelio de la Perfección aparece registrado solo por el título y la referencia a Epifanio/Filastrio.
3. Qué sabemos (y qué no) de su contenido
3.1. Juicio de los estudiosos modernos
Obras clásicas como “Los evangelios apócrifos” de Aurelio de Santos Otero y otros manuales resumen así la situación:
“Evangelio de la Perfección. De origen gnóstico. Conocemos su existencia por los testimonios de Epifanio y Filastrio, sin que por ello podamos concluir algo concreto sobre su contenido.”
En resumen:
- No se conserva ningún manuscrito del Evangelio de la Perfección.
- No tenemos citas textuales explícitas (solo una mención hostil al título).
- Cualquier reconstrucción detallada de su doctrina es especulativa.
3.2. Posible relación con el “Evangelio de Eva”
Hay una hipótesis importante: el Evangelio de la Perfección y el Evangelio de Eva podrían ser el mismo texto, o dos títulos para una misma obra.
- El Evangelio de Eva es también un evangelio gnóstico casi totalmente perdido, conocido por unas pocas citas de Epifanio (Panarion 26) donde lo asocia a los borboritas y a prácticas de “amor libre” y simbolismo sexual.
- Algunos estudiosos piensan que el Evangelio de la Perfección sería simplemente una variante del mismo texto, dada la cercanía de los títulos y el mismo grupo sectario.
Pero no hay consenso definitivo: otros distinguen ambos evangelios, señalando que Epifanio menciona los dos títulos por separado.
3.3. El término “perfección” en contexto gnóstico
En la terminología religiosa antigua, especialmente en misterios y gnosticismo, el término “perfecto” (teleios) designaba al “iniciado completo”, alguien que ha alcanzado la plena gnosis o iluminación.
- En varias corrientes gnósticas, la salvación no se daba por la fe sencilla, sino por un conocimiento profundo, esotérico, reservado a los “perfectos”.
- Probablemente el evangelio llevaba ese título porque presentaba una revelación destinada a los perfectos, o describía la “consumación” (teleíōsis) de la salvación en clave gnóstica.
Esto es coherente con el hecho de que los Borboritas/Ophitas usaban otros textos cargados de simbolismo esotérico (Libros de Seth, Apocalipsis de Adán, etc.).
“No temas a la oscuridad: es el velo que custodia la revelación de los perfectos.”
4. Contexto histórico y teológico
4.1. Tiempo y lugar probables
Aunque no podemos fijar una fecha exacta, por el contexto de las polémicas:
- El texto debió circular al menos desde el siglo III y estar activo todavía en el siglo IV, cuando Epifanio y Filastrio escriben.
- Se asocia a círculos gnósticos de Oriente (Siria, Palestina, Egipto), similares a los Ophitas/Borboritas, que desarrollaban mitos propios sobre Adán, Eva, la serpiente, Seth, etc.
4.2. Corriente doctrinal
Las pistas (secta usuaria, acusaciones de rituales sexuales, nombre del texto) sugieren:
- Cristología gnóstica: Cristo como emanación divina que trae conocimiento salvador, más que como Mesías histórico encarnado.
- Antropología dualista: fuerte contraste entre espíritu/luz y materia/oscuridad, típico gnóstico.
- Perfección como gnosis: la “perfección” no sería moral en sentido bíblico clásico, sino plena integración en la luz, con acceso a misterios reservados a unos pocos.
Pero insisto: esto es reconstrucción de contexto, no contenido textual del evangelio.
“El alma perfecta no asciende por fuerza, sino por memoria.”
5. Recepción patrística: por qué lo consideraron herético
En los padres de la Iglesia, este evangelio aparece siempre en listados de libros condenados:
- Epifanio lo llama “obra ficticia de pornografía” y lo incluye entre libros forjados por herejes.
- Catálogos posteriores lo citan junto con otros evangelios gnósticos y maniqueos como el Evangelio de Mani (Evangelio Vivo), el Evangelio de Eva, el Evangelio de la Verdad, etc.
Aquí hay dos niveles que conviene distinguir:
- Nivel doctrinal:
- Se rechazaba toda teología que negara la encarnación real de Cristo, relativizara la creación material o propusiera una salvación solo para una élite de iniciados.
- Nivel polémico/propagandístico:
- Los heresiólogos solían describir a las sectas gnósticas con acusaciones de libertinaje sexual y rituales obscenos (coitus interruptus, consumo ritual de semen, etc.), en este caso asociados sobre todo al Evangelio de Eva.
- No está claro cuánto es descripción fiel y cuánto caricatura polémica.
En cualquier caso, el Evangelio de la Perfección pasó pronto a la categoría de “libro prohibido y perdido” en la tradición católica.
“Muchos escuchan el mensaje, pero solo los perfectos lo entienden.”
6. El evangelio en la investigación moderna
6.1. Clasificación en la crítica actual
En manuales y diccionarios modernos, el Evangelio de la Perfección aparece:
- En el grupo de “evangelios apócrifos perdidos”, junto a otros como el Evangelio de los egipcios, el Evangelio de los nazarenos, etc.
- A menudo con la nota escueta: “Se supone de origen gnóstico; solo conocemos su existencia por las menciones de Epifanio y Filastrio; nada se sabe de su contenido.”
6.2. Hipótesis de identificación
Hay tres grandes líneas:
- Evangelio de la Perfección = Evangelio de Eva
- Basada en la cercanía en las listas de Epifanio, la asociación a los mismos grupos, y el hecho de que el Evangelio de Eva se describa como texto de gnosis “consumadora”.
- Evangelio de la Perfección = Evangelio de Felipe
- Algunos autores antiguos o modernos han sugerido que la mención de Epifanio podría referirse a una forma temprana del Evangelio de Felipe (como el de Nag Hammadi), también centrado en misterios de iniciación y simbolismo nupcial.
- Evangelio de la Perfección = texto distinto hoy perdido
- Es la postura más prudente: dado que Epifanio nombra por separado Evangelio de Eva, Evangelio de la Perfección y Evangelio de Felipe, lo más honesto es tratarlos como tres títulos diferentes, aunque emparentados.
No hay evidencia definitiva para ninguna identificación. La conclusión académica más seria es: no sabemos.
“Lo visible engaña; lo invisible instruye.”
7. Sentido del título: “Perfección” frente a la Biblia canónica
Es interesante confrontar la noción gnóstica de “perfección” con la noción bíblica.
- En el Nuevo Testamento, por ejemplo en Mateo 5,48 (“Sed perfectos como vuestro Padre celestial es perfecto”), la palabra griega teleios apunta a lo completo, maduro, íntegro en el amor, no a una élite esotérica.
- En los misterios y en el gnosticismo, el “perfecto” es el iniciado superior, que ha pasado por rituales, revelaciones y símbolos secretos.
El Evangelio de la Perfección, por su título y contexto gnóstico, seguramente:
- Presentaba una visión alternativa de qué significa ser “perfecto”, ligada a la gnosis y a un camino de iniciación mística.
- Ofrecía, al menos para sus adeptos, un “evangelio” (buena noticia) de consumación, es decir, la explicación de cómo el alma vuelve plenamente al mundo de la luz.
La Iglesia mayoritaria lo vio como una apropiación y deformación del lenguaje cristiano y bíblico.
8. Qué NO es el Evangelio de la Perfección (para evitar confusiones)
Conviene aclarar que el “Evangelio de la Perfección” apócrifo NO debe confundirse con:
- El “Camino de Perfección” de Santa Teresa de Jesús
- Obra espiritual del siglo XVI, a veces interpretada metafóricamente como un “evangelio” de la vida interior, pero no es un evangelio apócrifo ni tiene relación histórica con el texto gnóstico.
- Reflexiones modernas sobre “evangelio y perfeccionismo”
- Artículos contemporáneos evangélicos o católicos que hablan del “evangelio frente al perfeccionismo psicológico” son otra cosa totalmente diferente.
Cuando hablamos aquí del Evangelio de la Perfección, nos referimos exclusivamente al texto gnóstico perdido de los siglos III–IV.
9. Síntesis final: “todo lo que se puede saber”
En un esquema muy directo:
- Existencia y naturaleza
- Existió un texto llamado “Evangelio de la Perfección / Evangelium perfectionis”.
- Era apócrifo, gnóstico y considerado herético por la Iglesia antigua.
- Fuentes
- Solo lo conocemos por las menciones de Epifanio de Salamina (Panarion 26) y Filastrio de Brescia (Liber de haeresibus 33).
- Contenido
- No se ha conservado ningún fragmento claramente identificable.
- Posiblemente estaba relacionado con otros textos gnósticos centrados en Eva, María Magdalena, Seth, Adán, la serpiente, etc., y con la idea de “perfección” como culminación gnóstica.
- Cualquier descripción detallada de su narrativa o enseñanzas es especulación, no dato histórico.
- Relaciones textuales
- Algunos lo identifican con el Evangelio de Eva o con una forma del Evangelio de Felipe, pero no hay pruebas concluyentes.
- Valor teológico e histórico
- Es una pieza más del mapa de los evangelios gnósticos: muestra que, ya en los primeros siglos, existía una multiplicidad de “evangelios” privados, diseñados para grupos específicos, con una doctrina esotérica sobre la perfección.
- Su desaparición se debe probablemente a la condena eclesial y al hecho de que nadie lo copió en la tradición manuscrita posterior.
“El iniciado no busca un nuevo mundo: busca despertar en el verdadero.”
Conclusión
Un “estudio completo y detallado” sobre el Evangelio de la Perfección tiene necesariamente este límite: no hay texto que comentar, solo el nombre, el entorno gnóstico y los juicios de sus adversarios.
Lo que sí podemos afirmar con seguridad es que este evangelio:
- Fue un escrito gnóstico, probablemente de corte iniciático.
- Circuló en grupos heréticos del siglo III–IV (borboritas/gnósticos).
- Se presentaba como “evangelio” para los perfectos, en un sentido distinto al de la perfección evangélica canónica.
- Fue rechazado y desapareció, dejándonos solo el eco de su título en las polémicas de los padres de la Iglesia.
