Los textos «perdidos» de Jesús: Los evangelios gnósticos ahora revelados

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Estudio completo sobre los “evangelios gnósticos”

1) ¿Qué son y por qué importan?

Se denomina “evangelios gnósticos” —en sentido amplio— a un conjunto de escritos cristianos de los siglos II–IV que presentan revelaciones de Jesús en clave de gnosis (conocimiento salvador), con cosmologías alternativas (Dios supremo incognoscible, pleroma, eones, Sophía, demiurgo), fuerte énfasis en la iluminación interior y, a menudo, una lectura simbólica o docética de la encarnación, la pasión y la resurrección. No forman parte del canon bíblico y, en su mayoría, se conocen por la Biblioteca de Nag Hammadi, hallada en Egipto en 1945 (52 tratados en 13 códices coptos).

“evangelios gnósticos” es rótulo moderno y amplio. Incluye textos de corrientes diversas (setianos, valentinos, diálogos revelatorios, evangelios de sentencias), no un único movimiento monolítico.


2) Descubrimientos y manuscritos clave

  • Nag Hammadi (1945): colección copta (s. IV) que conserva traducciones de originales griegos más antiguos; reúne evangelios (p. ej., Tomás, Felipe, Verdad), apocalipsis, diálogos y tratados. Se ha propuesto que los códices pudieron pertenecer a un entorno monástico y que se ocultaron en el contexto de debates sobre libros “no canónicos” (Athanasio, Carta Festal 39, año 367).
  • Otros hallazgos relevantes:
    • Evangelio de María (fragmentario; Berlín Códice BG 8502, descubierto en 1896; copto s. V, original griego s. II).
    • Evangelio de Judas (Códice Tchacos; copto s. III–IV; edición pública 2006; debates sobre su interpretación).
    • Fragmentos griegos de Tomás (Oxirrinco, s. II–III), confirmando la antigüedad del corpus.

3) Principales textos y rasgos distintivos

  • Evangelio de Tomás: “evangelio de dichos” (114 logia), sin narrativa de pasión; una parte paralela a los Sinópticos y otra de coloración gnóstica. Datación discutida (núcleo temprano vs. composición s. II). Valor por la ventana que ofrece a tradiciones de dichos de Jesús.
  • Evangelio de Felipe: lenguaje sacramental y simbólico (bautismo, unción, “cámara nupcial”); cristología y soteriología de matriz valentiniana; no es un relato biográfico.
  • Evangelio de la Verdad (probablemente valentiniano, ca. 140–180): homilía soteriológica; conocido por Ireneo, quien lo condena.
  • Evangelio de María: diálogo revelatorio pospascual que otorga a María Magdalena autoridad de visión/enseñanza; su cosmología es afín a círculos gnósticos, aunque sin desarrollar plenamente el mito del demiurgo en lo conservado.
  • Evangelio de Judas: diálogo entre Jesús y Judas; reinterpreta a Judas como quien comprende el plan divino; el códice fue datado por C14 ca. 280 ± 60; su lectura “rehabilitadora” sigue debatida.

4) Doctrinas y teología (síntesis)

  1. Dios supremo y pleroma: fuente trascendente de la que emanan eones; Sophía cae/defecta generando la fractura ontológica.
  2. Demiurgo y creación: el mundo material sería obra de un artesano inferior (a veces identificado con el Dios del AT), razón de su imperfección.
  3. Antropología: “chispa divina” en algunos humanos; salvación como despertar (gnosis) y retorno al pleroma.
  4. Cristología: desde matices docetas (apariencia de carne) hasta “encarnación simbólica”; énfasis en revelación de conocimiento más que en expiación vicaria. (Véanse ataques de Ireneo contra el valentinianismo).
  5. Soteriología y ritos: bautismo/unción como signos de iluminación; en Felipe, la “cámara nupcial” funciona como metáfora de unión con el divino.

5) Corrientes y escuelas

  • Setianos: mitos elaborados sobre Barbelo, Sophía y la estirpe espiritual de Set; fuerte carga cosmogónica y especulación platónica.
  • Valentinianos (Valentín y discípulos): integración más “eclesial” y sacramental; gran parte del lenguaje de Felipe/Verdad les corresponde.

6) Canon bíblico y controversia antigua

La Carta festal 39 de Athanásio (367) es la primera lista antigua que coincide exactamente con los 27 libros del NT actual; paralelamente desaconseja los “apócrifos” usados por herejes. Antes y después hubo listas alternativas. Esto explica por qué muchos escritos hoy llamados “gnósticos” quedaron fuera del uso litúrgico católico/ortodoxo.
Las descripciones más tempranas de estas corrientes provienen de Ireneo (Contra las herejías, ca. 180), obra que, hasta 1945, fue la fuente principal para conocer el gnosticismo cristiano.


7) Métodos y criterios de estudio actuales

  • Crítica textual y paleografía: los códices coptos (s. IV) suelen traducir originales griegos anteriores; fragmentos de Oxirrinco ayudan a fijar fechas para Tomás.
  • Crítica de la forma y de las tradiciones: Tomás preserva logia con paralelos sinópticos y otros independientes; debate abierto sobre su dependencia/independencia y estratificación.
  • Historia de la recepción: la edición de Robinson (The Nag Hammadi Library in English) y la síntesis divulgativa de Pagels popularizaron el rótulo “Gnostic Gospels”.
  • Proveniencia de los códices: se discute si fueron producto de círculos monásticos o redes privadas; la investigación material (papeles fiscales reutilizados, etc.) matiza orígenes y circulación.

8) Temas recurrentes (con ejemplos textuales)

  • Revelación privada pospascual: diálogos de Jesús con discípulos selectos (María, Tomás, Judas)
  • Saber oculto vs. autoridad pública: tensión entre gnosis “para pocos” y enseñanza “para todos”, denunciada por Ireneo.
  • Rol de las mujeres: autoridad de María Magdalena como visionaria/maestra en su evangelio, en contraste con resistencias de Pedro/Andrés.
  • Lectura simbólica de los sacramentos: Felipe y la “cámara nupcial”.

9) Por qué no están en el canon

Criterios proto-ortodoxos (s. II–IV): apostolicidad, antigüedad, uso litúrgico universal (catolicidad), ortodoxia doctrinal. La mayoría de estos evangelios falla en uno o varios puntos (p. ej., atribución pseudónima, doctrina incompatible con la regla de fe, uso restringido a círculos esotéricos). La consolidación canónica culmina con listas como la de Athanasio (367).


10) Estado de la cuestión (debates abiertos)

  • Datación de Tomás: núcleo temprano vs. composición dependiente de los Sinópticos/diatésero (s. II). La evidencia papirácea más antigua hoy es POxy frg. s. II–III; debate vigente.
  • Interpretación de Judas: ¿rehabilitación de Judas o sátira antiapóstolica? La filología del copto y el contexto setiano siguen discutiéndose.
  • Unidad del “gnosticismo”: la historiografía reciente prefiere hablar de “gnosticismos” (plural) dadas las marcadas diferencias entre setianos, valentinos, herméticos cristianos y otros.

11) Lecturas recomendadas y fuentes fiables

  • Edición/Traducciones: The Nag Hammadi Library in English, ed. James M. Robinson (trads. y prólogos críticos).
  • Síntesis académicas:
    • Britannica (panoramas sobre gnosticismo y demiurgo).
    • Estudios sobre setianos y tradición platónica (Turner) y dossiers académicos recientes.
    • Entradas de contexto histórico-teológico sobre Ireneo y Contra las herejías.
  • Introducciones críticas accesibles: artículos de divulgación académica de Bart D. Ehrman sobre Tomás, setianos y Nag Hammadi (útiles para panorama y bibliografía).

12) Cronología mínima

  • ca. 120–200: composición de muchos textos (en griego); surgimiento y consolidación de escuelas setianas/valentinas.
  • ca. 150–200: polémica anti-gnóstica (Ireneo).
  • s. IV: copto de Nag Hammadi; traducción/compilación en códices.
  • 367: Carta festal 39 de Athanasio (lista de 27 libros del NT).
  • 1896: descubrimiento del Evangelio de María (BG 8502).
  • 1945: hallazgo de Nag Hammadi.
  • 2006: edición pública del Evangelio de Judas (Códice Tchacos).

13) Cómo leerlos críticamente

  1. Distinguir género: dichos (Tomás), homilías (Verdad), diálogos revelatorios (María/Judas), tratados místicos (Apócrifo de Juan).
  2. Separar estratos: identificar paralelos sinópticos vs. materiales propios; no extrapolar una “vida de Jesús”.
  3. Contextualizar: contrastar con la teología proto-ortodoxa (Ireneo, tradición litúrgica) y con el platonismo medio.
  4. Atender a la recepción: autoridad de María y otros personajes en comunidades minoritarias; lenguaje sacramental simbólico.

14) Conclusión

Los llamados “evangelios gnósticos” no son meros “competidores” tardíos de los canónicos, ni un bloque doctrinal uniforme. Son testimonios plurales de cristianismos de los siglos II–IV que reinterpretaron a Jesús y la salvación desde claves de conocimiento revelado y cosmología especulativa. Su estudio —a partir de Nag Hammadi, Judas, María, Tomás— ilumina la diversidad del cristianismo primitivo y el proceso de definición canónica en la Antigüedad tardía. Leerlos con criterios filológicos e históricos, y en diálogo con las fuentes patrísticas, permite valorar su importancia sin confundirlos con el NT ni con recreaciones modernas.


Anexos útiles (selección de “evangelios” y textos afines conocidos por Nag Hammadi u otros códices)

  • Evangelio de Tomás; Evangelio de Felipe; Evangelio de la Verdad; Evangelio de María; Evangelio de Judas; Evangelio de los Egipcios (Libro sagrado del Gran Espíritu Invisible); Apócrifo de Juan; Carta de Pedro a Felipe; Apocalipsis de Pedro; Sabiduría de Jesucristo.
Abel
Abelhttps://lamishna.com
Abel Flores es un periodista e investigador especializado -por más de 20 años- en la intersección entre la historia sagrada y los misterios metafísicos. Su trabajo profundiza en la Mishná, la Biblia y la Kabalá, explorando los códigos, contextos y dimensiones ocultas que conectan la tradición bíblica y rabínica con la evolución espiritual y filosófica del mundo. Combina rigor académico con una mirada crítica y analítica, revelando los vínculos entre teología, religión, poder y conocimiento ancestral.
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